viernes, 17 de abril de 2009

PONGÁMONOS EN SU LUGAR…

¡Hola navegantes! (o gente con tiempo libre) Hoy no quiero quejarme ni poner a parir a nadie, os sorprendéis, ¿verdad? Sin más, me gustaría alabar y compadecerme de las articulaciones. Si habéis oído bien, ar-ti-cu-la-ciones. Pues resulta que hay gente muy mala, muy mala que las tortura continuamente haciéndolas crujir.

Hay dos variedades, los que optan por el crujir simultáneo, lo que provoca un sonido estruendoso y corto. O por otro lado, la variación del crujir sucesivo, el cual se consigue con un crujir lento y uno a uno. Además es de señalar, que la gente que tiene dicho hobby se encarga de martirizar no solo a una articulación, sino que ¡cuantas más mejor! Siempre es de valorar la “ruta” de crujidos. Por ejemplo, cuello, dedos, muñecas, espalda… pueden variar las posiciones, pero es frecuente que cada persona tenga su ruta predeterminada y favorita.

Y es que no sólo se puede nombrar a las articulaciones como víctimas de los crujidos. También los que nos rodeamos de este tipo de personas sufrimos mucho por ello (y en silencio, como las hemorroides). Así que desde aquí propongo formar una plataforma en defensa de las articulaciones. ¿Por qué no?