jueves, 26 de marzo de 2009

LA LEY DE LA SELVA

¿Otra vez por aquí? Nos os podías resistir más a mis encantos y pasar otro día sin visitar mi blog, lo sé… creo que podré seguir viviendo con ello… Lo que pasa es que no sé si podré seguir vivo saliendo a salas petadísimas en las que después de esperar una laaaaaaarga cola para entrar dentro tienes que “luchar” con toda esa gente que estaba contigo, antes y después que tú en esa laaaaaarga cola.

Bueno, pero lo que más me jode en todo esto es cuando ya estas dentro. No sé si tengo ese don, pero siempre soy el afortunado que le toca de espaldas al pasillo que todo el bar cree que es el “pasillo oficial” por donde pasar. Y claro, así te pasas la noche moviéndote un pasito para delante y otro para atrás, para un lado y para el otro, todo sin formar, pero sin tratarse de un baile, sino por la gente que pasa y te empuja.

Y bueno, ya la noche se remata, si te toca al lado al grupo bailarín y saltarín que te deleita constantemente con sus codazos, culazos, golpecitos, pisotones y roces. Si es que para salir lo básico no es ir borracho o sucedáneos, sino ir con una buena dosis de paciencia. Ay señor, ¡lo que hay que aguantar!

No hay comentarios:

Publicar un comentario